
La Unidad de Policía Nacional Adscrita demuestra su eficacia con 23 investigados o detenidos por delitos forestales en lo que va de año, tras desarticular una red pirómana en Vilalba
En la constante y crucial batalla contra el fuego intencionado que asola los montes gallegos, una unidad policial se erige como la primera línea de defensa: la Unidad de Policía Nacional Adscrita (UPA) a la Xunta de Galicia. Su trabajo especializado y su integración en el territorio han vuelto a quedar patentes con el éxito de la «Operación Lapa», que ha logrado esclarecer 17 incendios forestales en el municipio lucense de Vilalba y culminar con la detención de dos presuntos pirómanos.
La investigación, llevada a cabo de forma conjunta por el Grupo de Investigación de Incendios de la UPA en Lugo y la Unidad de Investigación de Incendios Forestales (UIFO) de la Consellería do Medio Rural, desvela un patrón criminal claro. Los incendios, registrados durante el verano en las parroquias de Goiriz y Lanzós, se iniciaban sistemáticamente en horario nocturno (entre las 23:00 y las 03:00 horas) en los bordes de pistas forestales, buscando afectar zonas arboradas y sin dejar rastro de materiales acelerantes, lo que denota una clara intencionalidad y una metodología precisa para evitar ser detectados.
La UPA: Especialización y Coordinación al Servicio de Galicia
El éxito de esta operación no es un hecho aislado, sino un reflejo de la labor continua y especializada de la UPA. Su valor estratégico radica en varios pilares fundamentales:
- Conocimiento del Terreno: Al estar desplegada en la comunidad autónoma y trabajar codo a codo con los agentes forestales de la Xunta (UIFO), la UPA posee un conocimiento profundo de la orografía, las dinámicas sociales y los patrones delictivos recurrentes en el mundo rural gallego.
- Especialización Investigadora: La UPA cuenta con Grupos de Investigación de Incendios específicos en las cuatro provincias. Sus agentes son expertos en la escena del crimen, capable de analizar patrones, recabar evidencias y realizar complejas labores de inteligencia para identificar a los presuntos autores.
- Coordinación Interinstitucional: Como demuestra la «Operación Lapa», la colaboración entre la UPA, la UIFO y la Justicia (el Juzgado de Vilalba fue informado desde el primer momento) es fluida y esencial. Esta sinergia permite agilizar las diligencias y presentar casos sólidos ante los tribunales.
La Estadística que Habla por Sí Sola: 23 Investigados en 2025
La magnitud del esfuerzo de la UPA se cuantifica en resultados. Con las dos últimas detenciones en Vilalba, la unidad eleva a 23 el número de personas detenidas o investigadas en lo que va de año como presuntas autoras de incendios forestales en Galicia. Esta cifra no solo representa un golpe significativo a la delincuencia incendiaria, sino que actúa como un potente elemento disuasorio.
Un Compromiso con la Seguridad y el Patrimonio Natural
La labor de la UPA trasciende la mera investigación policial. Al perseguir estos delitos, la unidad protege uno de los bienes más preciados de Galicia: su patrimonio natural. Además, como se pudo constatar en Vilalba, muchos incendios buscan «generar alarma social», un objetivo que queda frustrado por la eficacia y la contundencia de las fuerzas de seguridad.
La Xunta de Galicia, a través de sus diferentes consellerías, apela continuamente a la «concienciación y la prudencia» de la ciudadanía. Sin embargo, ese mensaje de prevención se ve respaldado por el trabajo firme de unidades como la UPA, que garantizan que aquellos que decidan atentar contra el monte gallego se enfrenten a toda la contundencia de la ley.
La «Operación Lapa» es, en definitiva, un nuevo capítulo en la historia de una unidad que se ha convertido en un pilar indispensable para la seguridad medioambiental y la tranquilidad de todos los gallegos.
